Tras el cruce entre Petro y Trump, llegaron a Colombia los primeros deportados en aviones militares


BOGOTÁ.- En la madrugada de este martes llegaron a Colombia dos grupos de deportados desde Estados Unidos. Son en total 205 los migrantes que aterrizaron en el aeropuerto militar de Bogotá en dos vuelos de la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) que el presidente Gustavo Petro envió luego de la confrontación que elevó a tensión diplomática por las condiciones denigrantes en las que el gobierno estadounidense estaba repatriando.

El primer vuelo, con 95 reportados, llegó a Bogotá luego de que se solventara la crisis que tuvo lugar el pasado domingo entre los gobiernos de Colombia y Estados Unidos, cuando Petro señaló que no recibiría los dos aviones militares norteamericanos en los que eran trasladados colombianos deportados desde Estados Unidos por las condiciones en las que presuntamente viajaban.

De los 110 deportados, 26 son menores de edad.

“Vienen nuestros connacionales desde Estados Unidos libres, dignos, sin estar esposados. Estructuramos plan de crédito productivo, asociativo y barato para el migrante. El migrante no es un delincuente, es una persona humana libre”, publicó este martes Petro con las fotos de los migrantes en el Boeing 737-700 que llegó desde Texas.

“Esta disposición: dignidad para el deportado, se pondrá a todos los países que nos envíen deportaciones, y es apoyada hoy por la ONU”, insistió este lunes el mandatario colombiano. Por su parte, Trump reclamó su victoria en el cruce diplomático y aseguró: “Hemos dejado claro a todos los países que (…) vamos a enviar a los criminales, a los extranjeros ilegales que vienen de sus países”.

“Y van a llevárselos de vuelta rápido y si no lo hacen, van a pagar un precio económico muy alto, y vamos a instalar de inmediato aranceles masivos y otras sanciones”, añadió el presidente estadounidense, en relación a la estrategia que utilizó con Petro en una escalada el domingo.

El incidente es el primer choque de Petro con Trump, quien asumió la presidencia el 20 de enero con promesas de mano dura contra la migración irregular.

(COMBO) This combination of pictures created on January 26, 2025 shows Colombian President Gustavo Petro in Bogota on July 09, 2024 and US President Donald Trump in Washington, DC, on January 20, 2025. US President Donald Trump on January 26, 2025, ordered sweeping tariffs and sanctions against Colombia in retaliation for its refusal to accept deportation flights, as Bogota responded in kind with a 25 percent levy on US goods. (Photo by LUIS ACOSTA and Jim WATSON / AFP)LUIS ACOSTA – AFP

En medio de la disputa, Trump anunció aranceles de hasta 50% a las importaciones procedentes de Colombia y la embajada estadounidense en Bogotá suspendió la expedición de visas. Petro amenazó con medidas similares hasta que el conflicto se saldó diplomáticamente y el gobierno de Colombia aceptó recibir a los deportados.

Pocas horas después aterrizó en Bogotá el segundo vuelo con repatriados desde Estados Unidos, con otros 110 deportados. La aeronave despegó desde la Estación Aérea del Cuerpo de Marines de Miramar ubicada en San Diego, California.

Sobre los colombianos que llegaron se sabe poco. Por disposición de la Cancillería de ese país, la prensa no tuvo acceso a la llegada de los deportados alegando el “respeto del derecho a la privacidad y buen nombre de los connacionales”. Solo se conoce que en el grupo venía 26 niños, según confirmó el Estado colombiano, a pesar de que Trump declaró que los deportados eran “asesinos, narcotraficantes, pandilleros, asesinos de todo tipo”.

En la foto: dos de los 26 menores de edad que fueron deportados por Estados Unidos. Crédito: Instituto Colombiano de Bienestar Familiar.

De acuerdo con las autoridades, estos grupos de deportados desde Estados Unidos, la mayoría de las veces, registran tres perfiles. Una minoría tiene que ver con los colombianos inadmitidos, es decir, aquellos que llegan a un aeropuerto norteamericano y no pasan el puesto de control. Un segundo grupo son los migrantes irregulares, quienes han sido detenidos por las autoridades por no cumplir con los requisitos para estar en ese país. Y el tercero son aquellas personas que cometieron delitos en Estados Unidos, cumplieron su pena y fueron expulsadas.

Según el comunicado difundido en la noche del domingo por la Casa Blanca, “las sanciones de visas emitidas por el Departamento de Estado y las inspecciones reforzadas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza permanecerán en vigor hasta que el primer grupo de deportados colombianos sea devuelto con éxito”, es decir que técnicamente, las sanciones quedan levantadas.

Por su parte, el gobierno de Brasil convocó el lunes al encargado de negocios de la embajada de Estados Unidos para pedir explicaciones sobre el trato “denigrante” dado a los deportados que llegaron el viernes a Brasil, dijo una fuente del gobierno a AFP.

El actual máximo representante de Washington en Brasil, Gabriel Escobar, fue citado dos días después de que la Cancillería reclamara por el “tratamiento denigrante” que recibieron 88 brasileños repatriados durante el viaje de regreso a Brasil.

El gobierno de Brasil denunció que las condiciones en las que deportaron a sus nacionales fueron «inaceptables»

No trascendieron detalles sobre el encuentro entre la secretaria de Comunidades Brasileñas en el Exterior, Márcia Loureiro, y Escobar, quien fue convocado a falta de embajador, que aun no ha sido designado por la administración Trump.

El primer grupo de migrantes deportados brasileños de la era Trump arribó en un avión militar estadounidense la noche del viernes a Manaos, capital del estado de Amazonas. Varios de ellos contaron a AFP que no recibieron agua, fueron atados de pies y manos e impedidos de utilizar el baño durante el trayecto.

También denunciaron un calor insoportable, que produjo incluso desmayos entre los pasajeros.

La ministra brasileña de Derechos Humanos, Macaé Evaristo, dijo a periodistas que en la aeronave también viajaban niños con deficiencias, “que pasaron por situaciones muy graves”.

La citación al funcionario de Washington llegó luego de una reunión entre el presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el canciller Mauro Vieira en el palacio de gobierno.

El episodio supone el primer roce entre los gobiernos del flamante presidente republicano y el izquierdista Lula. Los vuelos para transportar deportados llegan a Brasil desde 2017 por “un entendimiento bilateral”, según una fuente del gobierno sudamericano.

Agencia AFP y El Tiempo (GDA)

Conforme a los criterios de

Los comentarios están cerrados.