San Lorenzo se impuso en La Plata ante Gimnasia, es puntero de su zona y sonríe de la mano de Russo

Gimnasia cambió de año, pero no pudo renovar su presente. Tras perder en el debut del Torneo de Apertura ante Instituto por 3 a 0, volvió a caer en su cancha ante San Lorenzo por 2 a 0: en el Bosque no gana desde noviembre y consumó su quinta derrota al hilo. En cambio, el equipo de Miguel Ángel Russo se llevó de La Plata otros tres puntos para sumar seis -el debut le ganó a Talleres 1 a 0- y confirmarse en el lote de los que comparten la primera posición con puntaje ideal.

San Lorenzo tenía la clave para ganar en el partido en el banco porque tras un primer tiempo de pocas situaciones, los que ingresaron en la segunda parte fueron fundamentales para cambiar lo que parecía encaminarse a un empate sin goles. Porque hasta los goles, hubo pocas muestras de pudieran ser posibles. Gimnasia estuvo cerca cuando Norberto Briasco estrelló la pelota en el travesaño y ya habían pasado 20 minutos de juego. En ese lapso, el local se había mostrado con vocación de ataque pero no lograba hacerlo con peligro hasta que el delantero conectó un centro que llegó desde la izquierda, con mala puntería.

La réplica llegó cuatro minutos más tarde, cuando Luis Ingolotti le tapó con la pierna el remate a Alexis Cuello. De a poco, San Lorenzo conseguía llegar al área contraria con algo riesgo pero el partido no entregó más situaciones como esas. El parate para la hidratación no interrumpió ni cortó nada: fue una pausa entre pelotas divididas, quites en el medio y entregas fallidas que truncaron la continuidad de las jugadas. Los alcanza pelotas fueron más enérgicos para apurar los laterales, que los propios jugadores para hacerlos.

Cuando parecía que nada podía suceder, el equipo de Russo logró el desequilibrio. Después de una serie de rebotes en la puerta del área, el Ciclón movió la pelota y Elías Báez se encargó del envío para la entrada de Andrés Vombergar -el primero de los cambios del Ciclón-, que saltó entre los centrales sin oposición.

La pelota picó antes de entrar y en el mismo momento que tocó la red, comenzaron los cantitos de los hinchas del Lobo, hasta ese momento reprimidos por la igualdad. Mientras los simpatizantes se desgañitaban en contra de los dirigentes, el entrenador y los jugadores y el Bosque se convertía en un hervidero, llegó el segundo de San Lorenzo.

Esta vez la jugada nació en la derecha con un centro que fue rechazado a medias, que Vombergar no pudo conectar pero que encontró a Emanuel Cecchini frente al arco para definir sin que el arquero pudiera impedir el tanto. El autor del segundo, había entrado en la segunda ventana y Agustín Ladstatter, que quien mandó el centro inicial, debutó un minuto antes en la Primera del Ciclón.

El timing de la visita fue fatal: al partido no le quedaban más que siete minutos y el adicional y Gimnasia tenía la misión imposible de emparejar las cosas con su gente en contra. El Lobo suma apenas dos triunfos entre los últimos 17 partidos y entre el final del torneo pasado y lo que lleva de este, cuenta cinco derrotas consecutivas. Esa estadística deja al entrenador Marcelo Méndez en la cuerda floja.

Con seis puntos y la valla invicta, el equipo de Russo tiene un comienzo ideal que lo encumbra en las posiciones de la Zona B, en compañía de otros equipos. Llega al partido de la semana próxima ante River con un envión que lo esperanza en el comienzo del campeonato.