“Hoy enfrentamos uno de los momentos más difíciles de nuestra historia a raíz de lo sucedido con nuestro negocio”, expresaron desde Distribuidora Caucete en un comunicado difundido en sus redes sociales tras el incendio que arrasó con sus instalaciones el pasado viernes. La empresa, propiedad de Gabriel Pelleriti y su pareja Anabel Ibáñez, confirmó que las pérdidas son “totales”.
La tragedia destruyó años de esfuerzo. Según allegados a los propietarios, la distribuidora, que inició con recursos modestos, había crecido significativamente hasta contar con dos sucursales, una amplia infraestructura y una gran cantidad de mercadería. Estiman que las pérdidas son multimillonarias debido a los daños provocados por las llamas.
A pesar del devastador panorama, los dueños destacaron el respaldo recibido por parte de su entorno. “En medio de esta tragedia, hemos descubierto la fuerza de la solidaridad y el poder del apoyo de nuestra comunidad. Queremos agradecer profundamente a los comerciantes vecinos que no dudaron en extendernos su mano, a nuestras familias que nos llenaron de fuerza y consuelo, y a todas las personas que, con sus palabras, acciones y gestos, estuvieron a nuestro lado”, señalaron en el comunicado.
El mensaje concluye con un mensaje esperanzador: “Hoy más que nunca estamos convencidos de que juntos podemos superar cualquier desafío. Seguiremos adelante con gratitud en el corazón y con la certeza de que tiempos mejores están por venir”.
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