Leila Pereira, de aliada de Bolsonaro a primera presidenta de Palmeiras y plantarse contra Alejandro Domínguez por una desafortunada comparación

Leila Pereira no es una mujer que pase desapercibida. Su nombre estuvo en boca de todos cuando el 15 de diciembre de 2021 asumió en Palmeiras como la primera presidente mujer de uno de los clubes más importantes de Brasil. Apostó fuerte de entrada. “Vengo a Palmeiras para sacarlo campeón del mundo. Es mi sueño y no me importa el tiempo que tarde. Lo voy a conseguir”, prometió. Y ahora, lejos de achicarse antes los grandes nombres del poder, sabe que ella es uno de esos peso pesado y criticó duramente a Alejandro Domínguez. Está en el centro de la escena.

«Cuando vi la declaración del presidente Alejandro Domínguez, confieso que me costó creer que fuera verdadera. Incluso pensé que podría ser un video manipulado por Inteligencia Artificial. De hecho, pensándolo bien, creo que ni siquiera la IA sería capaz de producir una declaración tan desastrosa como esta», disparó luego de que Domínguez dijera que una Copa Libertadores sin brasileños «sería como Tarzán sin Chita» como respuesta a la idea de Pereira de sumar a los clubes brasileños a Concacaf antes las sucesivas situaciones de racismo. «No es posible que, incluso después del caso de racismo del cual los jugadores del Palmeiras fueron víctimas en Paraguay, el presidente de la Conmebol haga una comparación abominable como la que hizo. Parece incluso una provocación», agregó.

Esa es la determinación que caracterizó a Pereira, de 60 años, durante una extensa carrera que la consagró como una exitosa (y multimillonaria) empresaria que hace un tiempo se volcó a la política. Propietaria de Crefisa -una compañía de crédito fundada en 1964, hoy transformada en banco- y de la Facultad de las Américas (FAM), estuvo siempre muy vinculada al club paulista, cuya situación financiera ayudó a estabilizar con sus continuos aportes. Y es una aliada política de Jair Bolsonaro, con quien compartió en el estadio Allianz Parque la jornada de la consagración en el Brasileirao 2018.

Asumió la presidencia en un momento de gran éxito para el equipo dirigido por Abel Ferreira, que pocos días antes había ganado su segunda Copa Libertadores consecutiva tras derrotar a Flamengo en el Centenario de Montevideo. Y apenas dos meses después estuvo muy cerca de cumplir aquella promesa inicial: Palmeiras perdió la final del Mundial de Clubes ante Chelsea con el agónico tanto de Kai Havertz en el minuto 117′. Tendrá revancha dentro de unos meses en Estados Unidos, a donde partirá como cabeza de serie del grupo A junto a Inter Miami, Porto y Al Ahly.

A pesar de su estrecho vínculo con Palmeiras, algunos señalan que Leila Pereira no es originaria de San Pablo, sino de Río de Janeiro. Nació en Cambuci y su pasado como hincha de Vasco da Gama se recuerda con cierta ironía, sobre todo en el ambiente futbolístico paulista. Es abogada y dirige la mencionada financiera Crefisa, que fue de las principales fuentes de inversión en el club desde 2015. Fundada en 1964 por su suegro, esa empresa jugó un papel central en la compra de jugadores y en la financiación de deudas acumuladas.

Un aspecto relevante para entender su ascendente poder fue la aprobación de la Ley de las Sociedades Anónimas en el Fútbol (SAF), que permitió la entrada de capitales privados a los clubes brasileños. De todos modos, aunque logró llevar a Palmeiras a la cima al conquistar su segunda y tercera Copa Libertadores -la primera había sido en 1999-, la presidenta fue cuestionada por su manejo financiero una vez que ejerció como máxima mandataria.