La oposición presiona a Axel Kicillof por la violencia y exige interpelar a su ministro de Seguridad

La reiteración de episodios de inseguridad de alto impacto, siempre tienen réplicas en los despachos de la Gobernación. Los casos registrados en menos de 10 días en Moreno y Florencio Varela posaron la lupa sobre el desempeño del ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso. Y las primeras reacciones llegan desde la oposición. Este lunes ingresó a la Cámara de Diputados provincial un pedido de interpelación al responsable de la gestión de las políticas públicas para el área y quien está a cargo de la conducción de la Policía Bonaerense.

Los reclamos incluyen otros formatos y otros actores. La mayoría involucran a dirigentes opositores. Pero la mancha venenosa que opera cada vez que estallan crisis de inseguridad roza también a intendentes del oficialismo.

El acto casi reflejo correspondió al bloque de diputados de la Coalición Cívica (CC). Los legisladores Maricel Etchecoin Moro, Romina Braga y Luciano Bugallo solicitaron la presencia del funcionario en el recinto para que informe sobre las medidas adoptadas para “enfrentar la actual crisis de inseguridad que atraviesa la provincia”.

Es un trámite que tiene resultado conocido: Alonso (igual que cualquiera de sus antecesores en el cargo; e idéntico a otros ministros convocados por la oposición) no irá a la Legislatura porque para que prospere la citación (contemplada en el artículo 92 de la Constitución y en el 219 del reglamento interno de la Cámara) los impulsores necesitan una mayoría de votos que no tienen.

Pero el pedido busca aplicar presión sobre la figura de Alonso, el sucesor de Sergio Berni (ministro entre 2019 y 2023) y de perfil opuesto en cuanto a presencia mediática y apariciones en situaciones apremiantes.

Esa impronta del actual funcionario termina resultando una complicación adicional para Axel Kicillof. Berni actuaba como “escudo”. Y afrontaba en soledad los conflictos por episodios de violencia o inseguridad que de forma periódica impactan en el territorio bonaerense.

No obstante, en la Gobernación dijeron que “no existen razones para modificar a un equipo de gestión que está desde el inicio del mandato”, del actual gobierno provincial.

Tampoco se prevén anuncios “de ocasión” luego de los asesinatos en Moreno y el final trágico de la pareja de adolescentes de Florencio Varela.

“Las medidas se informarán a partir de que estén en funcionamiento los nuevos patrulleros, las motos, la distinta tecnología que se incorporará. No hay una acción que se haga en otras jurisdicciones y que no se aplique en Buenos Aires”, dijeron este lunes en el palacio de la calle 6, de La Plata.

Las muertes por violencia urbana como la de Lucas Aguilar (20) el repartidor de Moreno que mataron el 29 de enero; o la de su colega, Pablo Fernando Bártoli (38); o la de los adolescentes Paloma Abigail Gallardo (16) y Josué Salvatierra (14) registrados en Bosques, partido de Florencio Varela, golpean primero en las puertas de las intendencias.

En ese eslabón de la administración estatal hay cuestionamientos y también silencios sugestivos sobre el desempeño de Alonso. La intendenta Mariel Fernández, de Moreno, reaccionó contra el Gobierno de Javier Milei por los «recortes» que aplicó a programas para Seguridad. La jefa comunal tiene raíces políticas en el Movimiento Evita y en los últimos meses se acercó con insistencia a Cristina Kirchner.

El grupo de alcaldes que apoyan el actual posicionamiento político de Kicillof, que busca autonomía del kirchnerismo duro, prefiere no expedirse. O sostiene la versión de una «ola fogoneada» desde sectores nacionales para horadar al gobernador.

En La Cámpora también hay dos posturas: la del silencio para evitar más roces con el gobernador. Y los que -por lo bajo- aseguran que hay falta de gestión y fallas en el posicionamiento público del gobierno provincial sobre la inseguridad.

Cerca de Kicillof exhiben datos como respuestas: según la Superintendencia de Análisis Criminal de la policía bonarense -informan-hubo en enero de 2024 13 homicidios dolosos en ocasión de robo y 7 en lo que va de 2025. En la categoría homicidios por robo automotor 4 en 2024; 0 en 2025.

«Desde que comenzó la gestión de Kicillof se pasó de 5,3 homicidios cada 100.000 habitantes, a 4,7% en 2024, según estadísticas de la Procuración de la Corte», aseguraron. En los albores de este siglo, hubo 17,2 muertes cada 100.000 habitantes. Fue en 2002.

“Los bonaerenses no pueden esperar más. En momentos tan difíciles, necesitan imperiosamente recuperar la tranqulidad y la seguridad. El Estado es quien debe garantizarles ese derecho. Instamos al Ministro a que compadezca lo antes posible para dar las explicaciones”, pidieron los legisladores de la CC.

También hubo otras voces que comenzaron a hacer planteos. El presidente del bloque PRO del Senado, Cristian Gribaudo, pidió que “Kicillof deje de lado la campaña y las internas en su espacio para hacerse cargo de la inseguridad alarmante».

El listado de críticas legislativas se extiende. «Hay que combatir al delito, no a los que reclaman seguridad. Hay que concentrarse en la gestión y no en ambiciones electorales», posteó hace días el presidente del bloque UCR, Diego Garciarena. En la misma línea, Aldana Ahumada (senadora PRO, de Merlo) dijo que «la inseguridad hace estragos. Hay un Gobernador y hay un ministro de seguridad que miran para el costado en este tema”, planteó.