En los dos primeros meses del año, en San Juan se patentaron 1.579 motos 0 km. Este dato representa un incremento significativo en la venta de motovehículos, ya que la provincia presenta un aumento del 91,6% en las ventas respecto al mismo periodo del año anterior.
En febrero, las concesionarias de San Juan registraron la venta de 695 motos 0 km. Aunque este número representa una disminución del 21,4% respecto a enero (mes en que se vendieron 884 unidades), existe un crecimiento de 65,9% en comparación con febrero del 2024.
A nivel nacional, en lo que va del año son 99.123 motovehículos 0 km patentados, lo que equivale a un crecimiento del 58,1% respecto de 2024. Por cuarto año consecutivo, las motos son más vendidas que los autos en el país, según datos de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara).
Las motos más vendidas fueron las Gilera Smash (3.495 unidades vendidas), Honda Wave 110 (3.363) y Motomel B110 (3.139). Estos modelos son los más accesibles, tanto en precio como en mantenimiento. El valor de venta oscila, aproximadamente, entre $1.700.000 y los $3.000.000. En total, fueron 38.710 unidades 0 km vendidas a nivel nacional solo en el mes de febrero, una diferencia positiva de 29,7% para este año. Las cifras muestran una tendencia positiva para el año.
Las causas en el aumento del patentamiento
Una de las principales razones del crecimiento en el mercado de motos es el regreso de la financiación. Las concesionarias ofrecen planes en cuotas previsibles y los bancos, ante la estabilidad, brindan líneas de crédito con tasas de interés razonables. Además, programas del Gobierno como “Mi Moto” o “Cuota Simple” facilitan la adquisición de motos de producción nacional.
En el mismo sentido, la estabilidad macroeconómica del país y la tendencia a la baja de la inflación generan mayor previsibilidad, lo que da confianza a los consumidores a la hora de invertir en un vehículo 0 km.
En tercer lugar, el precio del dólar que no ha sufrido escaladas abruptas hace que los costos de fabricación y de insumos como metales, plásticos y componentes importados, no reflejen un aumento en el costo final de los vehículos.
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