El 23 de enero de 1986, San Juan vivió una de las tragedias más impactantes de su historia reciente, cuando un accidente en la Ruta Provincial Nº 12, a la altura de El Tambolar, dejó un saldo trágico de 16 muertos, la mayoría miembros de la Banda de Música del Regimiento de Infantería de Montaña 22 (RIM 22). La tragedia conmocionó a toda la comunidad sanjuanina, un recuerdo doloroso que perdura hasta hoy. Este jueves 23 de enero se cumplieron 39 años del fatídico día.
El accidente
Esa noche, un colectivo que trasladaba a 27 personas –integrantes de la Banda de Música del RIM 22 y algunos civiles– regresaba a San Juan tras haber brindado un concierto en la localidad de Villa Nueva, en el departamento Calingasta, que celebraba su aniversario. El viaje comenzó a las 19 horas, y, tras un largo día, el colectivo se disponía a enfrentar el tramo más peligroso de su trayecto, el descenso de la cuesta de El Tambolar.
Aproximadamente a las 23 horas, mientras el vehículo descendía por la empinada pendiente, el conductor no pudo maniobrar correctamente una curva cerrada. El colectivo se desvió de la ruta, rompió las defensas y, en cuestión de segundos, se precipitó al vacío, cayendo varios metros hasta estrellarse contra el cerro que se encontraba enfrente. El vehículo terminó su caída en lo que se conoce como una garganta, un terreno extremadamente difícil de acceder.
El rescate
A pesar de la magnitud del accidente, dos integrantes de la banda lograron escapar del vehículo y, heridos, lograron llegar a la ruta. Fue en ese momento cuando se inició un operativo de rescate que duró más de 12 horas. Automovilistas que circulaban por la zona fueron los primeros en ver a los sobrevivientes y, tras ayudarlos, los trasladaron hasta el puesto policial de Pachaco. De allí, bomberos, policías, gendarmes y equipos médicos de los hospitales Rawson y Calingasta trabajaron sin descanso para llegar hasta el lugar del accidente.
La distancia de casi 100 metros entre la ruta y el colectivo dificultaba las tareas de rescate. Los equipos de socorro subían a los heridos, algunos de los cuales debieron ser transportados en las espaldas de los rescatistas. Ante la gravedad de las lesiones de muchos de los sobrevivientes, se solicitó la intervención de un helicóptero Ranger Bell, que también trasladó los cuerpos de los fallecidos.
Las víctimas
El accidente dejó 16 víctimas fatales, 14 de ellas miembros de la Banda de Música del RIM 22, y dos civiles. Entre las víctimas del regimiento se encontraban figuras destacadas como el Capitán Director de Banda, Hugo Emilio Emi, y otros músicos como los Suboficiales Principales Ángel Pascual Bazzanelli y Osvaldo Moreno, entre otros. Además, fallecieron dos civiles: Rodolfo Vera, un niño de 12 años, y el Maestro Hipólito Espín, docente de la Escuela Albergue Álvarez Condarco de Villa Nueva.
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