¿El argentino Nico Varrone y una maniobra temeraria en las 24 Horas de Daytona?: sacó de pista a un rival y lo acusan de “ajuste de cuentas”

Nicolás Varrone estuvo muy cerca de conquistar por segunda vez las tradicionales 24 Horas de Daytona, que este domingo inauguraron la temporada de la serie International Motor Sport Association (IMSA). A bordo del Corvette del Pratt Miller Motorsports, que compartió con el estadounidense Tommy Milner y el neerlandés Nicky Catsburg, peleó hasta el final por el triunfo en la categoría GTD Pro. Pero una polémica maniobra cuando luchaba por el podio -que muchos vieron como una «venganza» por un toque que había sufrido antes uno de sus compañeros mientras lideraban la prueba- le costó una sanción y lo relegó al séptimo puesto de la clasificación.

Varrone, que había ganado la prueba en 2023 en LMP3, fue el encargado de conducir el Corvette en el último tramo de la competencia. Tomó el volante cuando el coche iba sexto y, con una nueva demostración de su enorme talento y su experiencia en carreras de resistencia, remontó tres lugares para quedar en posición del podio. Sin embargo, cuando faltaban 10 minutos para la bandera a cuadros, decidió arriesgarse para ir por la victoria y le salió mal.

El argentino intentó pasar en una curva al sudafricano Kelvin van der Linde y al alemán Christopher Mies, pero en la lucha golpeó de atrás al BMW del africano, quien se salió de pista. Por ese toque recibió una sanción por maniobra excesiva que lo obligó a realizar una parada extra en boxes. Y el nacido en Ingeniero Maschwitz hace 24 años y sus compañeros tuvieron que conformarse con el séptimo puesto, mientras que el triunfo fue para Mies, Frédéric Vervisch y Dennis Olsen, con un Ford Mustang.

La maniobra de Varrone -vigente bicampeón de las míticas 24 Horas de Le Mans, en 2023 en GTE-Am y en 2024 en LMP2 Pro-Am- se hizo viral en las redes sociales, en las que muchos celebraron el «coraje» que tuvo el bonaerense al ir a buscar la victoria. Otros señalaron que el choque para el sudafricano fue una especie de «ajuste de cuentas» con los BMW del equipo Paul Miller Racing.

Es que cuando faltaban todavía unas tres horas de carrera, Milner lideraba con el Corvette del Pratt Miller Motorsports, seguido por su compatriota Connor De Phillippi a bordo de uno de los BMW. En su afán por robarse el primer lugar, De Phillippi chocó a Milner y le provocó daños en la parte trasera del choque, que lo forzaron a parar el boxes para reparar el auto y ceder bastante terreno.

La polémica en ese incidente se generó porque el brasileño Augusto Farfus, que marchaba delante de Milner con el otro BMW y 50 vueltas perdidas, bloqueó al compañero de Varrone y no lo dejó sobrepasarlo. Y al quedar «encajonado» entre los dos vehículos, el estadounidense no puso escapar del impacto.

Por eso, ese toque de Varrone sobre van der Linde en el cierre de la carrera pareció para muchos como una «venganza». Pero las palabras del argentino ante algunos medios locales tras el final parecieron indicar lo contrario.

«Pensé que iba a salirse para prepararse para la salida, yo me fui por dentro y nos tocamos. No era mi intención. Intenté ir por el hueco para el podio, pero fue una mala maniobra. Lo siento», afirmó Varrone, un amigo de Franco Colapinto que sueña con llegar a la Fórmula 1 como piloto General Motors.

Por otro lado, Luis Pérez Companc, el otro argentino presente en la carrera, ni siquiera pudo cruzar la meta. El Oreca 07-Gibson del equipo AF Corse, que el oriundo de Buenos Aires manejó junto a Nicklas Nielsen y Matthieu Vaxivière, sufrió una falla mecánica cuando lideraba con el francés al volante y quedó fuera de competencia, a 120 vueltas para la bandera a cuadros.

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