Lando Norris ganó el accidentado Gran Premio de Australia de Fórmula 1: cómo le fue a AlpinePor Darío Coronel

Lando Norris venció con su McLaren en el Gran Premio de Australia de Fórmula 1, en el comienzo de una temporada histórica, ya que la Máxima celebra sus 75 años. El inglés se impuso este domingo sobre Max Verstappen y su Red Bull, en una emocionante carrera disputada con pista mojada en el circuito urbano del Albert Park de Melbourne. La lluvia complicó el final de una competencia marcada por accidentes y otros incidentes.

Luego de una incesante lluvia en la mañana australiana, que obligó a cancelar la Feature Race (carrera principal) de la Fórmula 2 por medidas de seguridad, la caída de agua bajó en los instantes previos a la competencia de la Máxima. El auto de seguridad salió a pista y dio varias vueltas para ver las condiciones del escenario urbano.

Los comisarios deportivos determinaron que hubo condiciones para correr y los coches de F1 salieron a pista. Los recaudos se tomaron porque estos autos, al ser los más grandes de la historia por su tamaño, son los que más spray arrojan y, al tener menos visibilidad, se complica la seguridad en pista. Al disputarse en un escenario callejero en medio de muros, el panorama fue más delicado.

Los problemas llegaron antes de la largada, ya que en la vuelta previa el debutante Isack Hadjar se despistó y el Racing Bulls del francés quedó cruzado al lado del muro, por lo que el arranque se postergó. El alerón trasero del monoplaza se dañó y el galo quedó fuera de la competencia. Desconsolado, lloró al costado del trazado y En el camino hacia los boxes se encontró con Anthony Hamilton, padre de Lewis, quien lo consoló y le dio palabras de aliento.

En el arranque, Norris, que había hecho la pole position, realizó una impecable largada. En tanto que su compañero de equipo Oscar Piastri fue superado por Verstappen, que es un especialista en piso mojado. Como ejemplo más cercano estuvo la brillante victoria del cuádruple campeón mundial en San Pablo, donde largó 16º y triunfó en el Autódromo José Carlos Pace de Interlagos.

Pero el drama estuvo desde el comienzo, pues Jack Doohan destrozó su Alpine por un choque. También Carlos Sainz sufrió un golpe y su Williams terminó contra el muro. Tanto el australiano como el español perdieron el control de sus coches y chocaron. Dichos incidentes obligaron a la primera neutralización.

Una vez que la carrera se relanzó, Norris mantuvo el liderazgo sobre Verstappen y Piastri. En los primeros tramos, detrás se ubicaron George Russell (Mercedes), Charles Leclerc (Ferrari), Yuki Tsunoda (Racing Bulls) y Alex Albon (Williams).

Con el correr de las vueltas, Verstappen le recortó diferencias a Norris, aunque el desgaste del neerlandés lo llevó a cometer un error en el giro 18º, se pasó en un frenaje y lo sobrepasó Piastri.

Si bien no llovió en la parte inicial de la carrera, algunos tuvieron problemas, como el debutante Andrea Kimi Antonelli, que hizo un trompo de 360° y no sufrió porque se despistó en una zona que tuvo vía de escape, por lo que evitó un golpe con su Mercedes. Uno de los momentos más impresionantes fue el control de Antonelli, quien evitó colisiones en una situación límite.

Lando Norris aguantó los ataques
Lando Norris aguantó los ataques de Max Verstappen en el final (REUTERS/Mark Peterson)

A los corredores de McLaren les pusieron el compuesto duro, ese que demora más en conseguir la adherencia óptima en el asfalto. En tanto que Red Bull optó por una estrategia diferente con Verstappen y le calzaron los neumáticos medios a Verstappen, que tardan menos en tener grip. En el relanzamiento de la prueba en Australia, tanto los líderes como el resto de los pilotos cambiaron por gomas para piso seco y debieron circular por la huella. Pero la lluvia retornó y creció el dramatismo en el epílogo de la carrera.

En el giro 45, por la pérdida de adherencia, Piastri se despistó y Norris entró a boxes para cambiar las gomas. Estas alternativas permitieron que Verstappen tome el liderazgo.

Dos rondas más tarde, el cuatro veces campeón del mundo también cambió de neumáticos para piso mojado, pero la competencia se neutralizó por los despistes de Liam Lawson (Red Bull) y el choque de Gabriel Bortoleto (Sauber). Lewis Hamilton, en su debut con Ferrari, capturó el mando de forma efímera, ya que debió parar en boxes. Ante la parada en los pits del séptuple campeón mundial, Norris recuperó la punta.

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