Román Burruchaga, un gladiador: jugó siete horas en un día para ser el campeón en Piracicaba y ganar su primer Challenger


Dice el tango que primero hay que saber sufrir. Y vaya si sufrió Román Burruchaga, el hijo tenista del campeón del mundo en México 1986 con Diego Maradona, para ganar su primer torneo importante en el circuito. Es que el chico se consagró este domingo campeón del Challenger de Piraciba, en Brasil. Y lo hizo después de un domingo maratónico en el que tuvo que jugar dos partidos y cerca de siete horas.

Burruchaga, de 23 años y entrenado por Leonardo Mayer, tuvo su semana soñada a pesar de las inclemencia del tiempo. Fue tanta la lluvia que cayó en esa región que el torneo debió mudarse a una cancha techada de San Pablo para que pudiera culminar en tiempo y forma. Y fue allí donde el heredero del ídolo de Independiente consumó su obra.

Es que este domingo, por la mañana y por las semifinales, el sexto preclasificado batalló durante tres horas y dos minutos con el brasileño Gustavo Heide (7°), a quien venció por 7-5, 3-6 y 7-6 (7-0) para alcanzar su lugar en la definición.

Allí lo esperaba Facundo Mena, de 32 años, quien también había jugado a la mañana y había necesitado poco menos de dos horas para eliminar al experimentado boliviano Hugo Dellien (3°) por 3-6, 6-3 y 6-0.

De este modo, el hijo de Burru tuvo que pasar seis horas y 47 minutos en cancha para conseguir su primer título. Algo que nunca olvidará. Por la alegría. Y, claro, por el cansancio extremo.

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