Este sábado 21 de diciembre, en un acto de generosidad y solidaridad, internos del penal de Chimbas, junto al personal de Alta Tecnología Alimentaria (ATA), compartieron una tradicional y cálida merienda con los adultos mayores de la Residencia Eva Perón. La entrega de pan dulce, una típica delicia navideña, se llevó a cabo en el marco del Día Mundial de la Solidaridad, que se conmemora cada 20 de diciembre, y resultó en un emotivo encuentro entre reclusos y ancianos de la institución ubicada en la calle Benavídez.
El evento, organizado por el Servicio Penitenciario Provincial (SPP), ATA y el Ministerio de Familia y Desarrollo Humano, fue calificado por los participantes como “una caricia al alma”. Aproximadamente 40 reclusos, entre hombres y mujeres, trabajaron arduamente en la preparación de unos 400 panes, los cuales fueron repartidos a casi 200 adultos mayores de la residencia. Los internos recibieron previamente capacitación en cocina por parte de ATA, lo que permitió que los panes fueran elaborados con esmero y dedicación.
El acto no solo estuvo marcado por el gesto solidario de los internos, sino también por la música en vivo: los residentes fueron agasajados con un recital a cargo de la banda «Cantares», integrada por otros internos del penal, que hicieron vibrar la tarde con su música. A raíz de que hubo internos en el lugar, el SPP dispuso un operativo para trasladar a 12 reclusos, fiscalizados por el Juzgado de Ejecución Penal.
En el evento, Enrique Delgado, director del SPP, destacó el valor de este tipo de iniciativas como parte de un proceso de reinserción social de los reclusos. “Con esta acción solidaria, lo que hacen es reparar el daño cometido, cuando cometieron un delito”, señaló, enfatizando que acciones como estas contribuyen a que los internos adquieran oficios que les permitan reinsertarse laboralmente al salir de prisión.
César Forciniti, gerente de ATA, también expresó su satisfacción por el éxito de la actividad: “Estamos muy contentos, logramos realizar una capacitación que culminó con la entrega de certificados y ahora nos llena de orgullo poder ayudar tanto a los adultos mayores como a los privados de su libertad”.
Por su parte, Fernanda Vives, directora de la Residencia Eva Perón, resaltó la importancia de este gesto y la mejora en la atención a los abuelos. “Terminamos este año con una actividad que nos llena de orgullo. Nuestro gran desafío para 2025 es lograr un Centro de Día en la residencia para aquellos abuelos que no pueden estar solos durante el día, pero tienen un hogar y familia”, añadió.
Este acto de solidaridad no solo unió a internos y adultos mayores, sino que también reafirmó el compromiso de las instituciones involucradas con la reinserción social y la dignidad de las personas mayores.
Dato
Por cuestiones legales, no se pueden mostrar los rostros de los reclusos que participaron en el acto solidario.
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